Ahorran, acunan y martillan se inscribe en un género escasamente abordado por la historiografía educacional argentina: decodificar e interpelar la problemática de las urbanidades en ámbitos escolarizados.
La gestación de la nación moderna y la enseñanza durante la primera mitad del siglo XX en Argentina, se caracterizaron por tratar de engendrar sujetos dóciles y civilizados. Esta tarea generó un caudal de lecturas de y con urbanidad que intentaban garantizar el aprendizaje de códigos sociales destinados a regir los comportamientos de la niñez. Ahorran, acunan y martillan se traslada hermenéuticamente al corazón de esos discursos pedagógicos dedicados a prescribir prácticas, pero además revela entre ellos los intersticios de normatividad latentes en regulaciones emocionales profundas.